1 de diciembre de 2008

LA PISTA ELECTRÓNICA (Paisajes nocturnos)

El láser, ubicado en una punta de la pista, no para de moverse, disparando rayos de luz verde, que dibujan libremente en el aire y sobre los cuerpos de la gente que baila. Se da - como en toda pista- una batalla sin fin entre las luces y la oscuridad. Hay una gran bola espejada en el techo, que multiplica la energía sobre los bailarines del mundo electro, de los fanáticos del “punchi, punchi”.

La pista electrónica tiene fama de rara: tal vez por la gente, por los looks, por la música en sí, que parece monótona. Tal vez por eso es una pista aparte en todos los boliches: para que todos aquellos que no se la bancan - o no pueden estar ni un minuto, o les parece para extraterrestres o... etc, etc - no vayan y se queden en las otras pistas bailando otros ritmos.

Yo me hago cargo. Hace muchos años pensaba lo mismo, cuando no toleraba lo diferente, y me la pasaba diciendo: “ESTAN RE LOCOS”. ¡Como si yo fuera normal! Cuando uno va creciendo aprende a preguntarse cosas como....¿qué es lo normal? ¿Qué no lo es? Y otras preguntas existenciales y medio filosóficas que uno se hace, pero que ahora no da para explayarse en este paseo por la pista electrónica que intento darles.

En esta pista hay gente que cierra los ojos y se deja llevar, como poseída. La música invade los cuerpos en todas las pistas, pero me permito afirmar que en esta, es más evidente. Hay mucha expresión (se podría decir “zarpados en expresión, man”). La música en monótona o repetida o siempre lo mismo, para el que no entiende. Para el que sabe, la música electrónica va transmitiendo estados, va bajando, va subiendo hasta que llega a su estado máximo de explosión, cuando las paredes parecen estallar y la gente explota de locura. Para los que no entiendan, es algo así como un acto sexual con orgasmo consumado.
Cada tema electro es una historia y un camino a recorrer, como cada uno quiera. Hay movimientos libres, no hay una forma establecida para bailar y por eso cada uno hace la suya. Tiene mucho de individualista, hay poco roce de los cuerpos, pero también tiene mucho de tribu, de ronda, de seducción y de saber que todos están ahí porque aman esa música.
Se dice que “están todos dados vuelta” o que consumen algunas sustancias raras, pero, como en todo lugar, hay de todo y no es bueno andar generalizando.
La música es invisible, pero en esta pista parece materializarse. Uno ve como ingresa por los oídos e invade los cuerpos, y los va liberando uno a uno, hasta transformar la pista en una gran tribu en la que el DJ es el cacique de turno.
No faltan las gafas o los lentes oscuros (¿dónde está el sol que no lo veo? ..dirá una amiga con bronca por esto de que los electros llevan lentes al boliche). Pero es tanto el fanatismo, que las gafas son algo clave, suman y mucho.
La gente hace movimientos de cabeza, de pies, de manos, de hombros, repetidos pero a la vez en un estilo diverso en cada persona, como diciendo: “yo bailo así y no me importa nada”. Cada tanto irrumpen nuevas modas, pero las modas pasan y la música y la gente quedan. Así como un día llegó el paso flogger, un día se irá. Algunos apasionados o “emocionaditos” se mueven con todo; otros más tranquis acompañan con un trago en la mano.
Hace unos años llegó una visita inesperada a la pista: las botellitas de agua mineral. Así es de original el mundo electro: trajo agua al reino del alcohol. Todos sabemos que es por una droga llamada éxtasis, pero también hay algunos que se compran agua para estar en la onda. Exagerando un poco, la movida electrónica, sin querer, hizo un aporte a la salud de las personas. (Y el dueño de Eco de los Andes, chocho de alegría)
No quiero olvidarme de los curiosos, los que pasan a ver que onda y se van. No entienden mucho esto que ven, pero tratan de buscarle la vuelta y si no se la encuentran se van por donde vinieron.
Y si. Tanta gente así, atrapa, da curiosidad, intriga, misterio. Pero les aseguro que no hay ningún trastorno grave: sólo pasión, ganas y elección de un género musical. Les gusta la electrónica y nada más. Que no los jodan, si ellos no joden. Y si tienen ganas pasen, vean y déjense atrapar o de lo contrario, siempre habrá otra pista esperando, con otro clima.
La pista electro es un gran show, donde aparecen un sinfín de personajes. El show termina cuando el DJ decide dar paso al silencio En ese momento los que queden en la pista darán fuertes aplausos celebrando una noche espectacular donde fueron protagonistas.
En ese momento la realidad dice ¡hola!, y se dan cuenta de que el sol ya salió allá afuera y ahora sí, las gafas, cumplirán la función para la cual han sido creadas.
Mientras escribía esto me sonaba una parte de una canción de PINK: “God is a DJ, life is a dance floor, love is the rhythm, you are the music”… (Dios en un DJ, la vida es una pista de baile, el amor es el ritmo y tú eres la música).

También, antes de terminar esto, se me dio por buscar sinónimos de éxtasis, por curioso que soy, nomás: embelesamiento, enajenación, embriaguez, hipnosis, hechizo, encantamiento, abstracción, asombro, maravilla.
La pucha, me digo. Si hubiera empezado por esto, creo que no hacía falta escribir tanto. La pista electrónica, es todo esto. (Y MUCHO MAS)

5 comentarios:

Ignacio García dijo...

ahhhhhhhhhhhhh! floggerr!!! una vez más narrando con un alto estado de conciencia y uso de los sentidos. Nuevamente me siento muy identificado con este artículo y con las cosas que decís. Me gustaría aportar que la música, el dj, el ritmo, todo, se potencia si entre los integrantes existe el amor. Amor en la bella persona que gracias a su belleza genera curiosidad y ganas de estar fusionados. abrazo grande!

Anónimo dijo...

Mejor dicho imposible!!! Que sería de todo lo que nos rodea o nos rodean, si no hay sentimientos de por medio!!!! Es el condimento esencial de la vida jajaja...

Marcelo dijo...

Me gustó mucho! Recién llego de una pista electro y vi tu mail difundiendo el blog!!

Una abrazo!

Fernando Jerkovich dijo...

No me considero electro pero me animo a decir q la música electrónica parece ser una suerte de bolero de ravel en donde la mayoría se aburre porque cree oir la repetición de la misma melodía sin apreciar las variaciones dinámicas y orquestales.
Tenés la capacidad de captar los elementos necesarios para caracterizar una atmósfera determinada (se podría decir, sensibilidad literaria). Mis aplausos!!

Anónimo dijo...

En los 90 cuando en la Argentina (Cap. Federal)de dio comonezo y se armo la estructura de la movida, surgieron los pirmeros dj´s, (pilares de la escena) Cometieron el error de encasillar a la musica electronica en fuerte canciones con algo de estructura pop lo que deniminaron MARCHA, hasta el dias de hoy se comete el error de encasillar a si alos hits de la musica dance !!!